Publicaba en este Blog hace unos días la triste situación que está viviendo mucha gente en Malí.
Por desgracia la situación, lejos de mejorar, empeora por momentos.
Según los últimos informes miles de malienses, sobre unos 30.000 según diversas fuentes, se están refugiando en el sudeste de Mauritania. Su situación es precaria.
La zona donde se están refugiando es desértica, y además coincide con una gran sequía que está provocando una gran escasez de alimentos, y obviamente de agua.
Los refugiados, que huyen de los enfrentamientos entre los rebeldes tuaregs y el ejército de Malí, llegan a los lugares de asentamiento tras varios días de caminata y sin los más mínimos elementos de subsistencia.
Por este motivo la crisis alimentaria afecta no sólo a los refugiados si no también a la población local, que ya estaba sufriendo por la sequía, y que ahora se encuentra con esta carga adicional.
Esta situación está haciendo saltar todas las alarmas de las asociaciones humanitarias, aunque aquí en Europa parece que a nivel de la calle la gente no está muy, por no decir nada, informada al respecto.
Desde este Blog se intentará publicar las últimas noticias sobre la evolución de esta triste situación.
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