Pocas horas después de haber
presidido una reunión de gabinete en la cual lanzó duras acusaciones
contra los “enemigos históricos” de Venezuela, a los que atribuyó la
responsabilidad de la enfermedad del jefe de estado, el vicepresidente
Nicolás Maduro volvió anoche ante las cámaras de televisión para
anunciar al país y al mundo la muerte del presidente venezolano Hugo Chávez:
“Queridos compatriotas, mucho coraje, mucha fuerza, mucha entereza; tenemos que crecernos por encima de este dolor y de estas dificultades; tenemos que unirnos más que nunca, la mayor disciplina, la mayor colaboración, la mayor hermandad; vamos a crecernos, vamos a ser dignos herederos e hijos de un hombre gigante como fue y como siempre será en el recuerdo el Comandante Hugo Chávez”.
Durante todo el día de ayer corrieron rumores y especulaciones, luego de que el mismo gobierno reconociera un empeoramiento de las condiciones de salud del presidente, de 58 años, a causa de una “nueva infección respiratoria”, luego de la última intervención quirúrgica el 11 de diciembre, por un tumor contra el que luchaba desde junio del 2011. Mientras tanto se reunían cada vez más partidarios de Chávez ante el hospital militar Carlos Arvelo de Caracas, donde el presidente había quedado internado desde su regreso sorpresivo de Cuba, el 18 de enero.
Luego se produjo el anuncio de la expulsión de dos agregados militares de la representación diplomática estadounidense, supuestamente por “complotar” contra el gobierno. Finalmente fue anunciado el fallecimiento del presidente a las 16,25 hora local.
Las fuerzas armadas y la policía fueron desplegadas inmediatamente para “garantizar la paz”. El ministro de Defensa Diego Molero declaró que la cúpula militar prometió “respetar y hacer respetar la Constitución y la voluntad de nuestro dirigente comandante en jefe Hugo Rafael Chávez Frias”.
Mientras llegan desde todo el mundo y sobre todo desde América Latina las condolencias de los gobiernos –la presidente brasileña Dilma Rousseff habló de “pérdida irreparable”– Venezuela se prepara para siete días de luto nacional. Hoy y mañana, comunicó el ministro de Relaciones Exteriores Elías Jaua, la población podrá rendir despedirse del presidente en la cámara ardiente que se instalará en la Academia Militar de Fuerte Tiuna. En el mismo lugar se celebrarán, con la participación de varios jefes de estado, los funerales el viernes a las 10,00. Luego “se le dará cristiana sepultura”, agregó Jaua, sin especificar el lugar en que será sepultado el presiente.
En un clima de alta y constante polarización que fue creciendo a medida que se agravaban las condiciones de Chávez, Jaua también dirigió un llamado a los medios de comunicación a los que exhortó a promover la tolerancia y la calma, y a la población para que “se movilice, pero en paz”.
Hablando luego en exclusiva con Telesur –la llamada ‘anti-CNN’ querida por el gobierno de Chávez– Jaua anticipó que según al nueva Constitución está previsto que sea Maduro quien asuma temporalmente la presidencia en espera de que se convoque a elecciones en un plazo de 30 días.
Durante todo el día de ayer corrieron rumores y especulaciones, luego de que el mismo gobierno reconociera un empeoramiento de las condiciones de salud del presidente, de 58 años, a causa de una “nueva infección respiratoria”, luego de la última intervención quirúrgica el 11 de diciembre, por un tumor contra el que luchaba desde junio del 2011. Mientras tanto se reunían cada vez más partidarios de Chávez ante el hospital militar Carlos Arvelo de Caracas, donde el presidente había quedado internado desde su regreso sorpresivo de Cuba, el 18 de enero.
Luego se produjo el anuncio de la expulsión de dos agregados militares de la representación diplomática estadounidense, supuestamente por “complotar” contra el gobierno. Finalmente fue anunciado el fallecimiento del presidente a las 16,25 hora local.
Las fuerzas armadas y la policía fueron desplegadas inmediatamente para “garantizar la paz”. El ministro de Defensa Diego Molero declaró que la cúpula militar prometió “respetar y hacer respetar la Constitución y la voluntad de nuestro dirigente comandante en jefe Hugo Rafael Chávez Frias”.Mientras llegan desde todo el mundo y sobre todo desde América Latina las condolencias de los gobiernos –la presidente brasileña Dilma Rousseff habló de “pérdida irreparable”– Venezuela se prepara para siete días de luto nacional. Hoy y mañana, comunicó el ministro de Relaciones Exteriores Elías Jaua, la población podrá rendir despedirse del presidente en la cámara ardiente que se instalará en la Academia Militar de Fuerte Tiuna. En el mismo lugar se celebrarán, con la participación de varios jefes de estado, los funerales el viernes a las 10,00. Luego “se le dará cristiana sepultura”, agregó Jaua, sin especificar el lugar en que será sepultado el presiente.
En un clima de alta y constante polarización que fue creciendo a medida que se agravaban las condiciones de Chávez, Jaua también dirigió un llamado a los medios de comunicación a los que exhortó a promover la tolerancia y la calma, y a la población para que “se movilice, pero en paz”.
Hablando luego en exclusiva con Telesur –la llamada ‘anti-CNN’ querida por el gobierno de Chávez– Jaua anticipó que según al nueva Constitución está previsto que sea Maduro quien asuma temporalmente la presidencia en espera de que se convoque a elecciones en un plazo de 30 días.
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